Tim Brooks vuelve a Google, después de pasar por NVIDIA y OpenAI, para avanzar en la generación de vídeos de la empresa del buscador más famoso del planeta. La plantilla de directivos de OpenAI sigue disminuyendo pese a la gran ronda de financiación y el futuro que espera a la empresa de Sam Altman. Tras la salida de Mira Murati y el fichaje de Durk Kingma por Anthropic, ahora es el codirector de Sora, Tim Brooks, el que ha anunciado que abandona su puesto dentro del modelo de generación de vídeos para unirse a la sección de DeepMind de Google.
Durante sus dos años en OpenAI, Brooks ha sido una pieza fundamental en el desarrollo de Sora, una tecnología lanzada el pasado febrero que representa un salto cualitativo en la generación de contenido digital. Sora permite crear escenas realistas a partir de descripciones textuales, posicionando a OpenAI a la vanguardia en la creación de simuladores visuales.
Fuga de cerebros
El fichaje de Brooks por Google se produce en un contexto de salida masiva de ejecutivos de OpenAI, una tendencia que se ha intensificado en los últimos meses. Hace apenas unas semanas, Mira Murati, quien fuera CTO y pieza clave en el desarrollo de ChatGPT, también dejó la empresa, sumándose a otras salidas notables como las de Greg Brockman, Ilya Sutskever y John Schulman, todos cofundadores de la compañía.
Esta fuga de cerebros se produce tras la turbulenta salida y posterior regreso de Sam Altman a la dirección de OpenAI, que abrió una crisis interna cuyas secuelas aún se dejan sentir en la organización.
Google DeepMind y la IA
La incorporación de Brooks refuerza la apuesta de Google DeepMind por continuar avanzando en la generación de videos y simuladores mediante inteligencia artificial. Esta rama de Google ha estado trabajando intensamente en el desarrollo de IA avanzada, y la llegada de expertos como Brooks solo acelerará su capacidad de competir en este campo tan dinámico.
El traspaso de talento entre gigantes tecnológicos como OpenAI y Google subraya la creciente importancia de la inteligencia artificial en la tecnología del futuro, donde el desarrollo de modelos generativos y simuladores visuales será clave para avanzar en áreas como el entretenimiento, la realidad aumentada y la creación de contenidos.